Preparación de Masa para Pizza – Cuencos – Cerámica Polaca

Preparación de Masa para Pizza – Cuencos de Cerámica Polaca

La elaboración de una auténtica masa para pizza no comienza únicamente con buenos ingredientes, sino con los utensilios adecuados. Nuestros cuencos grandes de cerámica polaca, hechos a mano por la reconocida marca Ceramika Artystyczna, son ideales para mezclar, amasar y fermentar la masa de forma uniforme y profesional.

Gracias a su esmalte de alta calidad, son aptos para alimentos, fáciles de limpiar y perfectos para fermentaciones lentas en frío. Además de funcionales, aportan un toque tradicional y artesanal a cualquier cocina.

 

Formación como pizzero – ¿Qué se aprende?

Convertirse en pizzero profesional (pizzaiolo) requiere tanto conocimientos prácticos como teóricos. En los cursos especializados, inspirados en la tradición italiana, se aprende:

Contenidos teóricos:

  • Estructura del gluten y comportamiento de la masa

  • Tipos de harinas (Tipo 00, tipo 550, etc.)

  • Técnicas de fermentación: en frío, directa, con prefermento

  • Control de temperatura (agua, masa, horno)

  • Higiene alimentaria y normativa HACCP

  • Formulación de recetas y cálculo de costes

Conocimientos de alimentos:

  • Uso de sal de alta calidad (como fleur de sel) y aceite de oliva virgen extra

  • Tipos de levadura (fresca, seca, masa madre)

  • Nivel de hidratación y calidad del agua

  • Diferencias regionales en ingredientes (pizza napolitana, romana, etc.)


Receta: Masa Clásica para Pizza (para aprox. 1 kg de masa – 3 o 4 pizzas)

Ingredientes:

  • 600 g de harina para pizza (Tipo 00 o harina de trigo tipo 550)

  • 380 ml de agua fría

  • 15 g de flor de sal (fleur de sel)

  • 3 g de levadura fresca (o 1 g de levadura seca)

  • 20 ml de aceite de oliva virgen extra prensado en frío

Preparación:

  1. Disolver la levadura en el agua fría. No añadir sal aún.

  2. Colocar la harina en un cuenco grande de cerámica polaca y hacer un hueco en el centro.

  3. Verter el agua con levadura poco a poco mientras se mezcla con la mano o una cuchara de madera.

  4. Cuando la masa empiece a formarse, añadir la sal y luego el aceite.

  5. Amasar durante 8–10 minutos hasta obtener una masa lisa y elástica.

  6. Tapar y dejar fermentar la masa en la nevera durante 24 horas.

  7. Sacar del frigorífico 2 horas antes de usarla para que alcance temperatura ambiente.

Resultado: una masa aireada, con textura elástica y borde crujiente – perfecta para una pizza al estilo auténticamente italiano.